Una experiencia contada en primera persona: Telefónica (teléfono 1485) me ha llamado más de cincuenta veces para ver si cambio de operador móvil. ¡¡¡Más de cincuenta!!!
Ayer, por primera vez, les cogí la llamada. Un hombre muy paciente, insistía e insistía. Más o menos la conversación fue así:
Telefónica: Le llamo para ofrecerle los servicios de…
Yo: No me interesa. Me han llamado más de cincuenta veces. Dejen de llamarme.
T: ¿Había contestado antes? En mis registros no consta.
Yo: No, no había cogido. Y no quiero que sigan llamando. Dejen de llamar.
T: Le entiendo señor pero que lo que le estoy ofreciendo es…
Yo: ¡Que no quiero nada, que deje de llamarme!
T: Pero puedo bajar su factura de…
Yo: ¡Que no! ¡Que deje de llamar!
T: Si es que…
Yo: No me interesa nada que me pueda ofrecer, deje de llamar.
T: Pero es que usted puede..
Yo: ¡Que deje de llamar!
T: Bien, recuerde que si quiere todas nuestras ofertas están en nuestra web…
Esto me hizo pensar. Publicidad no solicitada, es decir, spam. Por teléfono (llamada y no SMS) pero spam. Este fin de semana pasado me han despertado de la siesta el sábado, dos veces. El domingo no llamaron, pero ayer lunes me llamaron tres veces, hasta que a la tercera descolgué y les solicité que cesaran en sus llamadas. Espero que lo hayan hecho.
Lo que más me llama la atención de este hecho es que sea la propia operadora telefónica la encargada de realizar este spam telefónico (llamadas indiscriminadas). Es algo preocupante.
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