Como ya dije, estuve en el San Inspirational, festival de publicidad interactiva organizado por el IAB. De ahí me traje muchos pensamientos, o temas de conversación. El segundo es: ¿Es la privacidad un valor sobrevalorado?¿Se planteará mi hija los peligros de hacer público su perfil en Internet?
Ocho de cada diez escolares tienen dado de alta su perfil en tuenti, una red social a la que sólo se accede por invitación. «Es que lo tienen mis amig@s, y así nos comunicamos y eso…». Gran argumento. Ahora bien, que los autores de esta red social juvenil, que tampoco es que sea gran cosa, tienen la mejor base de datos de España de adolescentes, clasificados por edad, sexo, provincia y gustos…
Por si acaso, a quien lea este texto le recomiendo otro: Descontrol en Facebook.
«El ganador del ‘Concurso de blogs de LV.es’, Fredy Álvarez, hacía hincapié en su blog en la afirmación de Mitjans: «cuando Internet se convierte en una extensión más de nuestra vida personal las precauciones deben extremarse al máximo ya que es un espacio transparente como una pecera«. Poca gente es capaz de perder la media hora que se necesita para leer las normas de privacidad que hay en cada red cuando se registra. No somos conscientes de que la información que queda en Internet sobre nuestra persona puede «afectar a la vida laboral, al pedir un crédito…», como destacaba el autor del blog ‘L’Era de la Informació i els Mitjans de Comunicació’.«