
Revisando las conclusiones del Estudio Anual de Redes Sociales que ha publicado esta semana el IAB, compruebo que «el 85% de los internautas declara que sigue a influencers a través de las redes sociales».
Teniendo en cuenta que según este mismo estudio «un 81% de los internautas utilizan redes sociales», en el Estado hay 15 millones de usuarios. Así pues, casi trece millones de personas en dicen estar atentos a lo que opinan las personas –para ellos- influyentes: youtubers, bloggers, etc.
Casi todos son seguidores fieles que sólo leen (71%). Reciben la información y la asimilan (o la utilizan para formarse una opinión). No comparten, no opinan.
Al final vamos a tener que tomarnos en serio a esos que hasta ahora eran frikis. Un vídeo de una bloggera de moda con un millón de seguidores en Youtube, puede costarle a una marca en torno a tres mil euros.
Hablando de super-influencenrs, un tweet de Cristiano Ronaldo anunciando tu producto se cotiza a 230.000, según un estudio reciente publicado por Endorse.
El tema tiene importancia. Sobre todo porque las acciones de relaciones públicas en entornos digitales resultan cada vez más necesarias. El volumen de información –contenido de calidad- que hay disponible en internet se multiplica por dos cada año según diversos estudios. Y seguiremos así por lo menos hasta 2020.
Las marcas se han dado cuenta de la posibilidad de desintermediación que existe gracias a Internet. Y que jugadores hasta ahora imprescindibles (como los medios de comunicación tradicional) son importantes, pero cada vez menos. Ahora bien, también es cada vez es más difícil destacar entre todo el ruido que hay en Internet, porque todos hacemos contenido de calidad.
Y ahí entran los bloggers, influencers. Esos frikis que controlan el medio como nadie y ponen a tu disposición a toda esa masa de fieles que les siguen en Internet.
Así pues, definir la estrategia de PR, de activación de tu contenido de calidad, es tan importante como generar ese contenido de calidad.
Por cierto, esa gente que sigue a influencers usa casi siempre Facebook (63%), seguido de Twitter (34%), Youtube (20%) e Instagram (17%).
Artículo publicado originalmente en Pulse, de Linkedin.