El contenido es el rey, el puñetero amo. Antes era conveniente establecer una buena estrategia de contenidos. Un plan de contenidos garantizaba el éxito. Ahora no es conveniente, es casi imprescindible. Ya explicamos las razones de esto en otro post. Pero ahora vamos a tratar de entender los motivos que provocan que el contenido se comparta, y vamos a intentar motivarte para que tengas esos motivos presentes desde el minuto uno.
Vivimos tiempos de saturación de contenidos. Ya lo hemos visto también. Todo lo el mundo genera contenidos, Y si crees que resulta suficiente con destacar por la calidad del trabajo que tú haces, siéntate y espera.
Hoy en día resulta necesario trabajar un 40% en la generación de contenido épico, y un 60% en la viralización del mismo. En conseguir que tu audiencia se enamore y encuentre los motivos para compartirlo, para enviárselo a sus amigos, para gritar a los cuatro vientos que les encanta.
Y este trabajo se hace después, mediante acciones de relaciones públicas. Pero también antes de empezar a generar cualquier pieza de contenido.
¿Antes de empezar? Pues claro, analizando los temas, la forma de plasmarlos. Preparando cada pieza de contenido para que toque las claves mentales que llevan a tu audiencia a darle al Like, retuitearlo, publicarlo en Facebook, distribuirlo por mail o Whatsapp…
Pero para esto, hay que entender los motivos por los cuáles la gente comparte contenidos.
[tweetshare tweet=»Nadie quiere compartir tus contenidos. Tienes que entender por qué lo hace y darle motivos.» username=»aibarrondo»]
La gente no comparte un contenido porque sea bueno. Ni siquiera cuando resulta contenido épico. Si Michael Jordan publica un tweet que diga «23» (es decir, un mal contenido), conseguirá miles de respuestas, millones de likes y millones de personas lo compartirán.
Si un usuario publica un post en su blog, y el mismo en New York Times, su texto (aun siendo el mismo) se compartirá infinitamente más en un canal que en otro. Incluso en términos porcentuales, será mucho más compartido el artículo del periódico americano.
Según Marc Schaffer, al que nombro de forma reiterada, hay que entender que la transmisión de contenidos «es una combinación de arte, ciencia y quizá una lógica matemática que incluye seis factores: desarrollo de marca, audiencia e influenciadores, distribución, anuncios, promoción y SEO, autority y orgullo social».
¿Por qué compartimos un contenido?
Compartimos contenidos por decenas de razones. Pero hay un proceso inherente a todos nosotros, que va íntimamente ligado a nuestra propia necesidad de reafirmar la imagen que queremos transmitir de nosotros mismos. Compartimos contenidos que dicen algo de nosotros. Que somos guays, que apoyamos una causa, que apoyamos a su autor, que tenemos los mismos atributos que el creador del contenido, que pertenecemos a un club, que nos gusta un tema (deporte, club, asociación….).
Porque, seamos serios, cuando publicamos un post, queremos que la gente lo lea y lo comparta. Pero nadie quiere compartirlo. Repito. De inicio, nadie quiere compartir tus contenidos. Tienes que esforzarte en pensar por qué cualquiera va a querer compartir lo que tú le cuentas. Convencerle respondiendo a sus posibles motivaciones.
Según diversas estadísticas, retuiteamos uno de cada 400 tweets que leemos. Nos gusta publicar una media de dos tweets al día. Si retuiteo el tuyo, ya sólo me queda otro. ¿Por qué debo hacerlo?, ¿Y yo qué saco? Si tu contenido responde a esa pregunta… ganador.
Hay un fantástico estudio publicado por grupo de estudiosos del New York Times, que he encontrado gracias al blog de Coeschedule, que señala que hay cinco razones por las que los usuarios comparten contenidos:
- Para aportar valor y entretenimiento a terceros. El 49% de los usuarios entrevistados señala que compartir contenido les permite informar a sus contactos de productos que a ellos les gustan. Y que son conscientes de que al hacerlo pretenden cambiar las opiniones o llamar a la acción.
- Para definirnos a nosotros mismos ante los demás. El 68% dice que comparte contenido que les permite ofrecer ante los demás una sensación mejor sobre lo que les preocupa o lo que son.
- Para hacer crecer y alimentar nuestra relación con otros. El 78% comparte información online, porque les permite estar conectado con personas con quienes no tendrían relación de otro modo.
- Autorrealización. El 69% comparte información porque le permite sentirse más comprometido con el mundo que les rodea.
- Para alzar la voz. El 84% dice compartir información para mostrar su apoyo a causas o situaciones que les preocupan
[tweetshare tweet=»Mayormente, los usuarios comparten #contenidos últiles, que creen que les representan ante los demás.» username=»aibarrondo»]
El New York Times dice que hay seis tipos de ‘compartidores‘ de contenido:
- Quieren ser percibidos como útiles y personas de confianza. Muchas veces comparten contenido directamente a través del email.
- Quieren ser vistos como valiosos y bien informados. Comparten contenidos que les hacen parecer inteligentes y bien conectados.
- Quieren ser vistos como creativos e innovadores. Y compartir contenidos, sobre todo a través de las nuevas redes sociales, forma parte de sí mismos y de su ser.
- Comparten contenidos que saben que van a provocar reacciones diversas por parte de terceros. Heavy users de Facebook y Twitter.
- Mariposas que aman volar e ir juntando y distribuyendo las ideas de todos. Son gente planificadora, creativa, pausada.. Yo aquí veo claramente a mi amigo Iñaki Lázaro (@ilazaro en Twitter).
- Seleccionan contenidos que creen que pueden beneficiar a una serie concreta de personas en las que están pensando antes de compartir). Son resolutivos, cuidadosos e informados. Y quieren ser percibidos como tales.
Piensa ahora en los últimos contenidos que has compartido. En los motivos que te han llevado a hacerlo. Y verás cómo las razones que te hemos ofrecido arriba motivaron ese acto. Y trata, si quieres, de ver cuál es tu perfil.
Mientras, por lo que me toca, espero que encuentres la motivación suficiente para compartir este post.
Un comentario
Chris Brogan dice que la gente comparte entretenimiento, emociones y contenidos valiosos, en ese orden. Lo que tengo claro es que hay un componente emocional muy relevante en cada acto de compartir contenido